Desde el pasado mes de diciembre las calles de Nápoles y otras de la región de Campania están llenas de basura tras una huelga de un vertedero de la ciudad. Además se han producido fuertes disturbios entre la policía y los vecinos tras la decisión de reabrir un cercano vertedero. La huelga ha adquirido tales […]
Desde el pasado mes de diciembre las calles de Nápoles y otras de la región de Campania están llenas de basura tras una huelga de un vertedero de la ciudad. Además se han producido fuertes disturbios entre la policía y los vecinos tras la decisión de reabrir un cercano vertedero.
La huelga ha adquirido tales dimensiones que ya no escapa a los ojos de los grandes medios empresariales de la comunicación que se están haciendo eco de la situación. Y es que a día de hoy se acumulan en toda la región de Campania alrededor de 110.000 toneladas de basura. 5.200 se concentran solamente en la ciudad de Nápoles.
La situación ha sido declarada de insostenible por parte del gobierno italiano, anunciando «medidas radicales» para poner fin a la crisis de limpieza debido a problemas de recogida y falta de vertederos. Esta crisis ha provocado al gobierno italiano una multa de la Comisión Europea por violación de la legislación comunitaria en materia de desechos.
Al parecer este problema no es nuevo en la región, ya que es algo que se repite desde hace más de 13 años, debido a la falta de vertederos y plantas de tratamiento de residuos, en los que se cruzan los intereses de la Camorra, la mafia local, que maneja desde hace años el jugoso negocio del tratamiento de basuras tóxicas y está interesada en que la crisis perdure.
El Ejército italiano ha empezado a recoger las montañas de desperdicios acumulados cerca de las escuelas que este lunes abrieron sus puertas tras las vacaciones de Navidad.
Por otra parte, cabe destacar las fuertes protestas de los vecinos del barrio napolitano de Pianura contra la decisión de reabrir el cercano vertedero de Pisani, cerrado en 1996, para hacer frente a la emergencia, habiendose producido graves disturbios entre los vecinos y la policía.