– La reunión de la Intersindical del miércoles pasado acabó con un llamamiento a una nueva jornada de huelgas y manifestaciones para el 23 de septiembre, dentro de 15 días. ¿Cuáles son las razones por las que la Unión Sindical Solidaires no es firmante de este llamamiento? – Como todas las organizaciones sindicales, llegamos a […]
– La reunión de la Intersindical del miércoles pasado acabó con un llamamiento a una nueva jornada de huelgas y manifestaciones para el 23 de septiembre, dentro de 15 días. ¿Cuáles son las razones por las que la Unión Sindical Solidaires no es firmante de este llamamiento?
– Como todas las organizaciones sindicales, llegamos a la Intersindical teniendo en mente el muy importante éxito de la jornada del 7 de septiembre. El gobierno quiere sin embargo imponer un calendario muy apretado para imponer su contrarreforma. Pone a los asalariados y los sindicatos ante el desafío de asumir un enfrentamiento social mayor. La Unión Sindical Solidaires considera que las organizaciones sindicales, conjuntamente, tienen la responsabilidad de aceptar ese desafío. Para ello, la mejor estrategia habría sido apoyarse en el éxito del 7 de septiembre para relanzar rápidamente y acelerar el ascenso de las movilizaciones: es la razón por la cual Solidaires propuso un nuevo llamamiento nacional a huelgas y manifestaciones a partir de la semana siguiente.
Las demás organizaciones prefirieron atrasar la próxima jornada nacional de huelgas y de manifestaciones al 23 de septiembre. Es la razón por la que no firmamos la declaración común.
– Durante esta larga reunión de la Intersindical, ¿cuáles fueron las propuestas de Solidaires?
– Defendimos la idea de que era posible ampliar las movilizaciones desde la próxima semana, en particular el 15 de septiembre, que los asalariados movilizados el día 7 esperaban una decisión de la intersindical en este sentido, que todo el mundo sabía claramente que se estaba en una carrera con el gobierno… Una fecha más cercana podía mostrar que la intersindical quería un ascenso de la movilización; podía dar confianza a los asalariados. ¡Y con una nueva cita de huelgas y de manifestaciones a partir del día 15, se podía también tomar una decisión sobre una fecha de manifestaciones ciudadanas el siguiente fin de semana y articular así movilizaciones en las empresas y movilizaciones ciudadanas!
– ¿Cuáles son, en opinión de Solidaires, las condiciones que hay que reunir para triunfar frente al proyecto de reforma de las jubilaciones de Woerth-Sarkozy?
– Estamos en un momento clave. El gobierno ha optado por la imposición en un plazo muy corto. No hay otra solución que preparar un enfrentamiento mayor del tipo de lo que logramos hacer contra el CPE (Contrato de primer empleo ndt) o contra el plan Juppé en 1995. Sin embargo, la decisión de esperar al 23 de septiembre para una nueva jornada de movilizaciones va contra este objetivo. En lugar de situarse en una dinámica que instale poco a poco el país en una situación de crisis política y social con una continuidad en una fecha muy cercana, retrasar la acción al 23 de septiembre implica el riesgo de la dilución.
Hay pues un debate de estrategia sobre cómo se construye una correlación de fuerzas…. Por ello, reafirmamos nuestra voluntad de hacer todo lo posible para imponer la retirada de este proyecto. Es la razón por la que la Unión Sindical Solidaires participará en la jornada de huelgas y manifestaciones del 23 de septiembre. Un movimiento de huelga general sigue siendo necesario para ganar. ¡Hay que construirlo con los colectivos militantes de todas las organizaciones que lo desean, con el conjunto de los asalariados y con el concurso activo de toda la población!.
Traducción de Alberto Nadal para Viento Sur http://www.vientosur.info/
Publicado en Mediapart, y luego en http://www.alencontre.org
Fuente: http://www.vientosur.info/articulosweb/noticia/?x=3097