Grecia necesita urgentemente nuestra solidaridad. Los próximos días son cruciales. El nuevo gobierno de Alexis Tsipras ha comenzado la negociación para hacer cumplir el mandato de su pueblo. Mediante la aplicación de su programa de recuperación económica y social, así como la restauración democrática, Syriza puede llegar a cambiar Grecia y, con nosotros, cambiar las […]
Grecia necesita urgentemente nuestra solidaridad. Los próximos días son cruciales. El nuevo gobierno de Alexis Tsipras ha comenzado la negociación para hacer cumplir el mandato de su pueblo. Mediante la aplicación de su programa de recuperación económica y social, así como la restauración democrática, Syriza puede llegar a cambiar Grecia y, con nosotros, cambiar las reglas en Europa para salir de austeridad. La troika, Angela Merkel, los liberales y el poder financiero lo saben y por eso quieren cerrar esa brecha que se abre en Europa.
Esta es la razón por la cual el Banco Central Europeo ha decidido cambiar el sistema de garantías de préstamos de los bancos griegos. Están tratando de sembrar el pánico. Esta brutalidad frente a la buena voluntad y esfuerzos de negociación realizada por el gobierno de Tsipras, es un ataque contra todos los pueblos europeos, contra de la democracia. Muestra hasta qué nivel de dificultad que existe para ganar el pulso que se ha iniciado.
Tenemos que estar al lado del gobierno griego. Los ciudadanos europeos deben ejercer presión sobre sus gobiernos para que se respete el voto de los griegos, para cambiar las reglas impuestas por el BCE y la Troika y dejar a Grecia respirar. Syriza necesita que le dejen tiempo necesario para reconstruir el desarrollo del país sobre una base nueva, en lugar de continuar asfixiándola. Esta es nuestra lucha común. Todas las naciones europeas necesitan salir de la austeridad y actuar para lograr soluciones europeas basadas en la solidaridad.
Llamo a todas las fuerzas que rechazan la austeridad y el chantaje de la deuda para aumentar la presión popular, en los diferentes países de la UE, sobre su gobierno, los bancos centrales y BCE multiplicando las acciones de solidaridad en toda Europa el 11 de febrero, el día de la reunión extraordinaria del Eurogrupo. La movilización debe mantenerse durante toda la semana, del 11 al 17 de febrero; durante el Consejo Europeo de los días 12 y 13 de febrero, y hasta la reunión del Eurogrupo del 17 de febrero.
Pierre Laurent, Presidente del Partido de la Izquierda Europea.