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Los alemanes perdieron ya su inocencia en torno a Irak

Fuentes: Gara

Los dos ingenieron alemanes secuestrado el martes en la refinería de Baji, en el norte de Irak, fueron mostrados ayer por sus captores, Ansar al-Tawhid wal Sunna (Los Partidarios de la Unidad y de la Sunna) en un vídeo emitido por la cadena Al Jazeera, en el que instan al Gobierno de Angela Mekel a […]

Los dos ingenieron alemanes secuestrado el martes en la refinería de Baji, en el norte de Irak, fueron mostrados ayer por sus captores, Ansar al-Tawhid wal Sunna (Los Partidarios de la Unidad y de la Sunna) en un vídeo emitido por la cadena Al Jazeera, en el que instan al Gobierno de Angela Mekel a que faciliten su puesta en libertad.

Los alemanes perdieron ya su inocencia cuando se descubrió que la secuestrada Susanne Osthoff había mantenido relaciones con agentes del servicio secreto exterior alemán, el BND (por sus siglas en alemán) en Bagdad. La alemana fue secuestrada el pasado 25 de noviembre y liberada el 18 de diciembre. Los medios alemanes la presentaron como una «arqueóloga» que por sus relaciones personales conocía muy bien el país y dominaba la lengua y que por todo ello quería ayudar en su reconstrucción. Cuando recobró su libertad tuvo una entrevista en TV en la que salió poco afortunada de tal forma que algunos medios dudaron de su estado anímico.

Poco después medios alemanes descubrieron que agentes del BND había pasado desde Bagdad informaciones al servicio secreto militar, la DIA, en plena guerra contra Irak a pesar de que en 2002 el entonces canciller, el socialdemócrata Gerhard Schröder, dijo publicamente que Alemania no participaba en la contienda. Algunos políticos se preguntaron si el Ejecutivo había perdido el control sobre el BND. Entonces surgió la noticia de que el vicecanciller y ministro de Exteriores, Joseph Fischer, se entrevistó durante una hora con los dos agentes en Amman, Jordania, en diciembre de 2003. Además los dos hombres, ambos soldados, recibieron una condecoración por parte del Ejército de EEUU. A todo ello se suma la polémica en torno a los vuelos secretos de la CIA, que llegó a secuestrar a cuatro alemanes para llevarlos a centros de tortura ubicados en países lejanos. Según se sabe ahora, policías y agentes secretos alemanes interrogaron a los secuestrados, sabiendo ­por lo menos en el caso de uno de ellos­ que había sido torturado.

Por lo tanto, hay material suficiente para que el Parlamento Alemán, el Bundestag, cree una comisión investigadora. Sin embargo, el tripartito de la canciller Angela Merkel se opone a esclarecer los hechos. En el centro de la investigación estaría su ministro de Exteriores, el socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier, ex responsable de los servicios secretos en el gobierno de Schröder. Por eso el actual ministro de Interior, el cristianodemocrata Wolfgang Schäuble, rechazó rotundamente la investigación parlamentaria «porque afectaría a la seguridad del Estado». Su socio de Gobierno, el SPD quiere obstruir el caso para proteger tanto a Steinmeier como al ex ministro de Interior Otto Schily y al ex canciller Schröder.

Aún así, los tres partidos de la oposición, los liberales del FDP, los socialistas del Linkspartei.PDS y los verdes tienen suficientes votos en el hemiciclo para poder instar una investigación. No obstante son los verdes los que se oponen. Su objetivo es proteger a su ex estrella mediática Joseph Fischer. Este dijo a su partido que no sabía nada de los agentes del BND en Irak. La revista Focus le llevó la contraria gracias a sus buenos contactos con el BND. Desde entonces, los verdes han dejado de pronunciarse en favor de una investigación parlamentaria.

Para que no sea la prensa la que aclare las andanzas del BND, algún poder fáctico del Estado alemán ha decidido acabar con la imagen de victima de Susanne Osthoff. Hace días, la versión electrónica del semanario «Der Spiegel» informó que funcionarios de la Embajada alemana en Bagdad encontraron unos 4.000 dólares en la ropa de la rehén cuando ésta se duchaba. A raíz de esta noticia la Policía federal alemana, el BKA, declaró que sabía de este hallazgo y que el dinero procedía del rescate. Según el BKA, los secuestradores devolvieron a Osthoff los 3.000 dólares que le habían robado más una indemnización. La Policía alemana no requisó la suma «por razones humanitarias».

Otro tema que genera polémica es el hecho de que el BND facilite al servicio israelí Mossad pasaportes auténticos con la identidad de alemanes que nunca viajan al extranjero.

El tripartito de Angela Merkel y los verdes tienen muchas cosas que esconder. –