El ministro de Energía y Minas de Nicaragua, Emilio Rappaccioli, destacó en conferencia de prensa los importantes avances logrados durante sus cuatro años de gestión. Según el titular del MEM, la política energética impulsada por el gobierno sandinista se enfocó en tres líneas de trabajo estratégico, que están reflejadas en el Plan Nacional de Desarrollo […]
El ministro de Energía y Minas de Nicaragua, Emilio Rappaccioli, destacó en conferencia de prensa los importantes avances logrados durante sus cuatro años de gestión.
Según el titular del MEM, la política energética impulsada por el gobierno sandinista se enfocó en tres líneas de trabajo estratégico, que están reflejadas en el Plan Nacional de Desarrollo Humano, y que son el aumento de la capacidad de generación y el cambio de la matriz energética, incrementar la cobertura del servicio de electricidad en el país y mejorar la eficiencia y el ahorro de energía.
Actualmente, Nicaragua tiene una cobertura del servicio de electricidad del 67 por ciento (54 por ciento en 2007) y casi el 50 por ciento de la energía consumida tiene como fuente la biomasa, con una eficiencia energética muy baja.
Además, el país centroamericano mantiene todavía una Intensidad Energética (cantidad de energía usada por cada mil dólares producidos) entre las más elevadas del continente y aprovecha solamente el 6 por ciento del potencial energético de fuentes renovables que existe en su territorio.
«Aprovechamos muy poco de nuestro potencial energético. Tenemos un potencial, entre hidroeléctrico, geotérmico y eólico de 4.500 MW y solamente estamos explotando 250 MW, es decir menos del 6 por ciento», explicó Rappaccioli.
Según el ministro, en Nicaragua existe suficiente potencial para cambiar la matriz energética, ya que actualmente el 65 por ciento de la producción de energía usa todavía combustibles fósiles (74 por ciento en 2007), con un promedio del 70 por ciento en sus cuatro años de gestión.
«Es obvio que no podemos resolver el problema con una varita mágica, sin embargo Nicaragua está encaminada hacia ese objetivo y debemos agradecer a países como Venezuela, Cuba y Taiwan, que nos han permitido salir de la emergencia energética, instalando 280 MW en estos años», recordó Rappaccioli.
El titular de MEM resaltó también el gran esfuerzo hecho por el gobierno sandinista al instalar 343 MW en cuatro años (2007-2010). «Es un promedio de casi 90 MW por año. Es un resultado muy importante si lo comparamos con lo que hicieron los gobiernos en los 16 años anteriores (1990-2006), instalando solamente 240 MW, con un promedio de 16 MW por año».
Cambio de matriz energética y cobertura eléctrica
Rappaccioli advirtió también que ya comenzó el trabajo para llegar a un cambio definitivo de la matriz energética. Prevé que para el año 2016, más del 90 por ciento de la generación de energía será en base a fuentes renovables.
De acuerdo con los programas del MEM, durante el período 2011-2016 se generarán 600 MW, principalmente a través de proyectos geotérmicos (San Jacinto-Tizate) e hidroeléctricos (Tumarín, Larreynaga, Hidro-Pantasma, Ye-Ye). En el período 2017-2025 se sumarán 290 MW más.
Otro enfoque importante en estos cuatro años de gestión del MEM fue el de la cobertura del servicio de electricidad en el país.
Durante este período se encrementó la cobertura del 54 al 67 por ciento a nivel nacional, sobre todo en la zona rural, históricamente marginada por los gobiernos neoliberales.
Se llevó la energía eléctrica a 895 comunidades, 44 mil viviendas, beneficiando a 262 mil personas. Además, se construyeron 2 mil Km de líneas eléctricas, se instalaron 5.700 paneles fotovoltaicos y se construyeron micro y pequeñas centrales hidroeléctricas en zonas donde no se pudo llegar con el tendido eléctrico.
Desafíos futuros
Para el 2011, el Ministerio de Energía y Minas tiene previsto extender la red eléctrica en 293 comunidades más, beneficiando a 293 comunidades, 16 mil viviendas y 92 mil personas, trabajando muy de cerca con los gobiernos locales.
También se va a desarrollar en 42 puntos del país el programa Eurosolar, financiado por la Unión Europea (1.7 millones de euros) y con el 10 por ciento de recursos nacionales. Van a continuar los proyectos geotérmicos e hidroeléctricos y se va a impulsar el Programa Nacional de Electrificación Sostenible y Energía Renovable (PNESER), financiado por el BID y otras organizaciones internacionales.
Con respecto a la línea de trabajo para mejorar la eficiencia y el ahorro de energía, Rappaccioli explicó que ya se capacitaron a más de mil profesores, se insertó como materia obligatoria en el Pensum de Primaria, se realizaron auditorías en el sector público y privado para mejorar el ahorro de energía.
Finalizando su intervención, el titular del MEM calculó en 2 mil millones de dólares la inversión para los próximos años.
Fuente: http://nicaraguaymasespanol.