Ecos desde Europa del Encuentro Continental de Montevideo
Apenas concluido el Encuentro Continental por la Democracia y contra el Neoliberalismo del 16 al 18 de noviembre en Montevideo, surge el momento del balance. «Fueron tres días muy importantes de movilización en las calles, debate político profundo, construcción de convergencias, reflexión, intercambio y definición de una agenda futura común hacia 2018, para fortalecer la lucha contra el neoliberalismo y por la democracia», subraya Celia Alldridge, del Secretariado Internacional de Amigos de la Tierra Internacional, con sede en Holanda, y militante de la Marcha Mundial de las Mujeres (MMM). Alldridge evalúa desde Ámsterdam los aspectos más positivos de la convocatoria uruguaya pocas horas después de haber regresado de la capital sudamericana.
Como el principal momento de movilización de 2018 de la Jornada Continental por la Democracia y contra el Neoliberalismo, el Encuentro reunió más de 3 mil representantes de todo el continente, desde Estados Unidos hasta Argentina. Entre las organizaciones promotoras se encuentran la Confederación Sindical de las Américas (CSA) -con muchos de sus miembros nacionales-, la CLOC – Vía Campesina, la Marcha Mundial de las Mujeres, Jubileo Sur, la Campaña para Desmantelar el Poder de las Trasnacionales y Amigos de la Tierra América Latina y el Caribe (ATALC).
La Jornada nació en una reunión de noviembre de 2015 en La Habana. Se celebraban entonces los diez años de la derrota del ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas) en la cumbre de los pueblos de Mar del Plata, Argentina.
Los debates de Montevideo, explica Alldridge, se centraron en cuatro ejes considerados claves en la confrontación anti-sistémica en el continente: la lucha contra el libre comercio, sus herramientas institucionales y contra toda la arquitectura de la impunidad; el combate contra las transnacionales como agentes principales -con la complicidad de muchos Estados- en la explotación de los pueblos y saqueos de los territorios. Además, la reflexión sobre la defensa de la democracia y la soberanía de los pueblos; y la integración de los mismos. «A los que se incluyeron dos temáticas transversales: el ambientalismo y el feminismo popular, construido desde la base por trabajadoras del campo y de la ciudad y que va de la mano del combate antirracista, anti patriarcal, anticolonialista», enfatiza.
La reflexión en torno del eje sobre «la soberanía de los pueblos y la democracia participativa que queremos en tanto pueblos, constituyó un punto toral de la convocatoria uruguaya», explica la militante. Con el análisis de fondo, completa, de los sistemáticos ataques a la democracia continental por parte de la nueva contraofensiva neoliberal que se expresa en los golpes en Honduras (2009) y Paraguay (2012); en el golpe institucional del 2016 en Brasil; y en la tentativa de golpe reaccionario en Venezuela.
Para Alldridge, que durante varios años hizo parte del Secretariado Internacional de la Marcha Mundial de las Mujeres en San Pablo y fue coordinadora de la ONG suiza de cooperación solidaria E-CHANGER en Brasil, el encuentro de Montevideo también fue un momento de reafirmación de la importancia de tomar permanentemente las calles, como espacio de disputa. Al mejor estilo de la batucada feminista de la MMM que animó activamente la convocatoria con canciones y slogans de resistencia. «Ocupar el espacio público significa alimentar nuestra convivencia socio-política y definir un marco claro para construir alternativas colectivas, en particular para nosotras mujeres, históricamente confinadas a la esfera privada por el modelo patriarcal».
«Los principios de solidaridad, internacionalismo y unidad entre los pueblos y procesos de lucha estuvieron permanentemente presentes durante los debates del Encuentro Continental», enfatiza Alldridge quien reivindica la importancia de la Declaración Final con 29 puntos de análisis y acción sobre la situación geopolítica internacional, continental y respuestas populares. (https://seguimosenlucha.wordpress.com/2017/11/19/declaracion-final-encuentro-continental-por-la-democracia-y-contra-el-neoliberalismo/).
La misma, incluye también las principales acciones unitarias previstas para los próximos meses. La más cercana, la movilización de repudio a la Cumbre ministerial de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en Buenos Aires que se realizará entre el 10 y el 13 de diciembre. Para 2018, serán clave las movilizaciones del 8 de marzo por el Día Internacional de lucha de las mujeres; el Foro Alternativo del Agua de Brasilia, Brasil, en el mismo mes; las jornadas del 1ero de mayo; la denuncia de la Cumbre de las Américas de junio en Lima, Perú; la movilización contra el G20 en Argentina en el segundo semestre del año próximo, así como movilizaciones nacionales entre el 19 y el 25 de noviembre reivindicando y actualizando los acuerdos de Montevideo.
El Encuentro Continental de Montevideo «reafirmó la necesidad de la integración popular de las Américas y la convicción de que solo con esa articulación y convergencia se podrá construir un verdadero enfrentamiento al modelo neoliberal, patriarcal, racista e imperialista», concluye la militante feminista.
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