2023 permanecerá en la Historia como el año en que los Palestinos oprimidos se levantaron con valentía contra el fascismo colonial para defender sus hogares, su dignidad y su vida.
2023 permanecerá en la Historia como el año en que los Palestinos oprimidos se levantaron con valentía contra el fascismo colonial para defender sus hogares, su dignidad y su vida.
El mundo, sin despeinarse, lleva observando, desde hace por los menos una semana, cómo Israel -una de las principales potencias militares del mundo- vuelve a asesinar una vez más, alegre y meticulosamente, a miles de palestinos que previamente fueron encerrados en una estrecha ratonera de 51 kilómetros de largo y entre 12 y nueve de ancho, limitada por el propio enclave sionista al este y al norte, Egipto al sur y el mar Mediterráneo al oeste. Ese minúsculo espacio donde se hacinan -o hacinaban- 2,3 millones personas, es uno de los lugares más densamente poblados del mundo, con 4.110 personas por kilómetro cuadrado.
El movimiento Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) hunde sus raíces en una herencia centenaria de resistencia popular palestina indígena al colonialismo de colonos y al apartheid.
El filósofo italiano Franco Berardi ‘Bifo’ ha registrado en un diario los acontecimientos que antecedieron a la declaración de guerra de Israel sobre Gaza.