PPK, ex jefe del presidente Vizcarra, fue derribado, con la complacencia de éste último, por, entre otras cosas, priorizar los intereses políticos de la clase dominante, pactando con el desgastado fujimorismo en el Congreso y el conservadurismo de la iglesia católica, produciendo ingentes protestas sociales que (con la excepción del Indulto al dictador Fujimori) conquistó […]
PPK, ex jefe del presidente Vizcarra, fue derribado, con la complacencia de éste último, por, entre otras cosas, priorizar los intereses políticos de la clase dominante, pactando con el desgastado fujimorismo en el Congreso y el conservadurismo de la iglesia católica, produciendo ingentes protestas sociales que (con la excepción del Indulto al dictador Fujimori) conquistó victorias. Esta cuestión parece haberlo comprendido el movimiento social que, frente al alza del combustible, el costo de vida y la rabia contra el Congreso de la República, ha salido a protestar indignado en el sur del país y Lima, exigiéndole al gobierno que dé marcha atrás en su paquetazo y cierre el Congreso, poniendo al jefe de Estado, en una encrucijada.
¿Con Dios y con el Diablo?
Sin embargo, la conclusión que él y su premier Villanueva sacaron de la caída de PPK es que hay que fortalecer la alianza con el Congreso de la República (controlado por el Fujimorismo), para evitar la vacancia presidencial.
Por su lado, algunos analistas infieren que la estrategia de Vizcarra es la de contentar a Dios y al Diablo a la misma vez y por eso le exigen definición.
«… Martín Vizcarra va a Olmos, levantan unos letreros y señala que hay que evaluar el proyecto. Protestan los transportistas y dice que hay que revisar los peajes. Surgen algunas protestas contra Tía María y dice que está en evaluación aún. Si la gestión de Vizcarra se va a ceñir porque a la primera protesta da marcha atrás, entonces mejor que renuncie…», declaró Juan Carlos Tafur (https://luzroja.lamula.pe/2018/05/10/martin-vizcarra-peru-presidente-renuncia-fujimorismo-presion-debil-opinion-analisis/tafur/).
Por su lado, el ultraderechista, Aldo M, redactó, «…Este gobierno del ‘Tigre’ Vizcarra y el ‘León’ Villanueva se chupó una vez más y por miedosos que son decidieron no seguir adelante con los contratos petroleros marinos. Además, ya Keiko le había bajado el dedo a esos contratos el otro día en Piura. ¡Estos dos tienen más miedo que siete viejitas agarradas de la mano cruzando la avenida Abancay! …», (Gobierno malagua, diario Perú 21; 24/05/18).
No obstante, Vizcarra, ya definió por los poderes fácticos. Fue la burguesía, organizada en la CONFIEP, la que conspiró con él para que asumiera la presidencia de la República. Lo que pasa es que Vizcarra no tiene base social ni partido político para ir a una arremetida represiva como quiere la derecha. Su debilidad es intrínseca a su asunción conspirativa al poder. No tiene legitimidad. Por eso se vio obligado a constituir un gabinete con la derecha y la izquierda, perdiendo el apoyo de la bancada oficialista.
La vicepresidenta conspira. Rajaduras en el frente interno del presidente
Esta decisión ha favorecido a su rival en el Ejecutivo y vicepresidenta Mercedes Araoz, quien ha sumado al bloque parlamentario oficialista (con Sheput en al parecer un negocio petrolero con irlandeses paralizado por el ejecutivo por elementos de corrupción), a su campaña conspirativa para «golpear» a Vizcarra y si fuera posible vacarlo. «… «Hemos hablado de los temas de la cumbre, no tengo una amistad con él ( César Villanueva ). Sigo pensando -es mi modo de ver las cosas, lo lamento- que el vacador no puede ser presidente del Consejo de Ministros. Evidentemente, yo voy a seguir colaborando con el presidente Vizcarra en bien del país. Pero tengo mi punto de vista, no creo que él pueda ser alguien que represente la posibilidad de una reconciliación adecuada», (diario El Comercio, 26/05/18).
En respuesta, el premier dijo: «Son expresiones de la ex primera ministra, respeto las opiniones. Pero nosotros estamos enfocados en esta tarea de levantar y unir al país, y no en temas confrontacionales. Para nosotros, los temas que estuchamos, sea como críticas o elogios también, ni nos marean ni nos ponen de mal humor», (La República, 26/05/18).
El presidente Vizcarra también intervino en el altercado y «parchó» a la vicepresidenta al señalar que, «cada quien puede tener su punto de vista, pero que es él quien elige al premier».
El paquetazo
Así las cosas, se le está abriendo el frente interno del presidente a nivel de la bancada oficialista que en conjunto está cuestionando su alianza con el fujimorismo (pero que en el fondo responde a una pérdida de poder en el ejecutivo). Esta cuestión aunada a la impopularidad de su paquetazo lo hizo recular en su política de querer grabar los salarios de más de S/. 2 075, cuestión que no fue bien recibida por la clase dominante.
Y es que Vizcarra parece que no es tan estúpido como para ponerse la soga al cuello. Sabe que, si no reculaba, las protestas iban a aumentar más en sectores de clase media conllevando a un deterioro más rápido de su administración.
Un nuevo auge de protestas sociales y huelga indefinida en el Sur
«Martín Vizcarra tiene una bomba de tiempo entre las manos», declaró el congresista fujimorista por Puno, Moisés Mamani, al referirse al contundente Paro del 30-31 de mayo en su región.
Y no es para menos. La paralización fue total en el sector transportes, comercio (que es la principal fuente de ingreso), educación, municipales, etc. En la región Puno.
Y como reguero de pólvora, las protestas se han trasladado a las demás regiones del sur del país (que tienen a los puneños como una población migrante y mayoritaria en toda la macro región sur).
En Tacna (frontera con Chile), el paro de transportistas de carga pesada fue total.
En Arequipa, las Asociaciones de Vivienda, también salieron a reclamar con varios miles de trabajadores municipales, estudiantes, pobladores, mujeres, etc. Que bloquearon con piquetes puntos estratégicos que conectan la ciudad con el exterior. En el centro de la Ciudad, obligaron a los comercios a que cerraran sus tiendas.
De igual forma en Puerto Maldonado (frontera con Brasil), cientos de trabajadores salieron a marchar contra el alza del costo de vida a través del impuesto selectivo al consumo (ISC).
En todas las protestas del Sur, el sector transportista ha sido uno de los más dinámicos por ser afectados directamente con el aumento de la gasolina.
Al final, los más de 30 gremios que apoyaron el paro reclamaron atención a Vizcarra y que retroceda en su paquetazo. No obstante, en Tacna, los transportistas están convocando a una huelga indefinida para el 05 de junio que está siendo coordinada con las demás regiones y sus frentes de Defensa.
Cierre del Congreso en Lima
Y en Lima, la protesta del 31 de mayo exigiendo el cierre del Congreso congregó a aproximadamente 5 mil ciudadanos, en su mayoría jóvenes (colectivos, anarquistas, socialistas, etnocaceristas del preso político Antauro, etc.), y trabajadores (de limpieza pública, Backus, etc.), que trataron de marchar hacia el Congreso de la República, pero que fueron repelidos por las fuerzas policiales con bombas lacrimógenas.
Una marcha espontánea con carteles denunciando la compra de tvs, computadoras y frigobares y rosas para los congresistas por más de 600 mil soles mientras el pueblo sufre un nuevo paquetazo. La rabia en los carteles y las expresiones de la gente era contundente. Las consignas más sonadas eran, «Congreso escucha el pueblo te repudia», «el pueblo unido jamás serpa vencido», «atrás, atrás, atrás, Vizcarra incapaz», «el pueblo exige cierre del Congreso», etc.
Había mucha impotencia y desorientación en cómo seguir la lucha para cerrar el Congreso y lo que vendría después, pero las ganas de seguir luchando a pesar de las lágrimas causadas por las bombas lacrimógenas estaban ahí presentes.
Al final, el Frente Patriótico, uno de los impulsores de la marcha, convocó de nuevo a otra movilización para el 05 de junio (un día simbólico por la rebelión indígena de la selva denominada Baguazo que terminó en un conato de guerra civil).
Vizcarra cae estrepitosamente en las encuestas
Días antes de las protestas, y frente a una estrategia presidencial de delegar al premier la agenda ministerial mientras que él viaja por todo el país como «bombero», las encuestas, reflejaban una caída de más de 20 puntos en estos dos meses de gobierno (la encuestadora GFK le da 10 puntos menos).
«…Del 71.4% que tuvo su designación como Jefe de Estado, en marzo pasado, ha descendido a 46.1% en este mes, según la última encuesta realizada por CPI, entre el 19 y 23 de mayo…El estudio, que se ejecutó a nivel nacional en el área urbano y rural para evaluar su gestión, señala que del 41.6% que aprueba el desempeño del jefe de Estado, el 51.8% pertenece a los entrevistados en Lima Metropolitana y el 42.9% al interior del país…», (https://exitosanoticias.pe/alza-de-precios-incide-en-descenso-de-aprobacion-de-martin-vizcarra/).
No hay duda que el paquetazo aplicado desde principios de mayo le está pasando la factura a Vizcarra.
Así, el 17.2% de pobladores encuestados considera que es «el alza de precios de gasolina, alimentos y alto costo de vida», la razón del descontento. Y en segundo lugar (5.1%) está «querer crear un impuesto a las personas que ganan poco sueldo».
«…Le siguen, entre lo más negativo, la corrupción en el entorno del Gobierno/ no combatir la corrupción (4.6%) y «no realizar una buena gestión de gobierno/ no hace nada por el país/ no realiza obras …Al ser interrogados sobre el problema que más preocupa actualmente a la ciudadanía, los encuestados señalan en su mayoría (41.7%) que es la delincuencia y falta de seguridad ciudadana. En segundo lugar (21.4%) consideran que es la situación económica familiar: falta de puestos de trabajo, empleo, bajos sueldos, ingresos familiares, alza de precios de alimentos, inflación. Le sigue, la corrupción en general (17.3%). Otro aspecto que consideran de gran preocupación es el maltrato a la mujer, el feminicidio, y las violaciones a mujeres y/o niños (8.4%)…», (diario Exitosa, 27/05/18).
Por otro lado, la aprobación de las instituciones del estado es la siguiente: Congreso 10.6%, Poder judicial 9.6%, Fiscalía de la Nación 14.5%, Policía 37.0% y FF.AA. 62.3%.
De esta forma, Vizcarra, de no superar las protestas y dar marcha atrás con el paquetazo, puede estar enfrentándose a su primera crisis política. Es un proceso muy complejo y contradictorio. Porque de dar marcha atrás, no podrá cerrar el déficit fiscal que bordea el 3.5% del PBI, y la clase dominante pensará mejor su apoyo al presidente. Y si sigue adelante con el paquetazo, las masas, pueden irse a una huelga indefinida de forma espontánea (la burocracia de la dirección sindical nacional de la CGTP es indiferente y ha convocado una Jornada de «lucha» para descomprimir la protesta para el 19 de Julio), y terminar pidiendo su cabeza.
En política no hay casualidades. Por eso no es casualidad que la vicepresidenta haya lanzado sus críticas al gobierno en este contexto de protestas sociales.
Necesaria articulación de la vanguardia en un partido de tradiciones mariateguistas
Por estas razones, es imprescindible la articulación de la vanguardia para la fundación de un nuevo Partido de Trabajadores mariateguista con un programa socialista que recupere lo mejor de su legado e incorpore lo nuevo de la lucha de clases.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.