Escritor y politólogo de origen
argentino. Actualmente radicado en Guatemala
Artículos
“Al socialismo le falta mucho -muchísimo- para ser justo. Quizá al final ni se llame socialismo, porque va a ser híbrido. Pero no hay mal mayor que el cáncer imperial [capitalista].”
Las guerras internas -guerras sucias, por cierto- que vivieron la gran mayoría de países de la región, cada uno con sus características particulares, dejaron marcas que aún está presente como mensaje cultural en el colectivo.
Como la lucha de clases continúa –siempre al rojo vivo–, el capítulo de ese paso atrás que significó el cierre del socialismo europeo y la reconversión de la Unión Soviética permitió a la derecha sentirse omnipoderosa, triunfal, ganadora absoluta.
Los movimientos y las protestas sociales son mucho más que un medio: son espacios en los que se crean, recrean y transmutan las identidades colectivas. Son la voz de la sociedad, los mensajes que la sociedad envía a los que ejercen el poder.