Artículos

Hay hombres que matan por dinero: son los sicarios o “matones”, aquellos que viven precisamente de eso, de matar gente. Están también los que matan para robar, conseguir dinero o hacerse con algo valioso: son los que asaltan bancos y matan, en este caso ocasionalmente y como algo accidental, a quien se cruza en su camino.

Según las últimas noticias, el ataque palestino a Israel ha sido parte de una operación militar llevada cabo por Hamas para liberar a un número indeterminado de palestinos que Israel mantenía encarcelados en la prisión de Shikma (Ashkelon), localizada a escasos kilómetros de la franja de Gaza.

Estimulados por los gobiernos europeos y a base de repetir este tipo de noticias día a día, los inhumanos sistemas de comunicación de Occidente intentan hacer de estas tragedias hechos cotidianos.

El pasado fin de semana se multiplicaron en Londres las manifestaciones de apoyo a Julian Assange en las que se exigió su inmediata libertad y el archivo del procedimiento por el que la justicia británica pretende extraditar a Estados Unidos al periodista de Wikileaks.

La prensa británica se esfuerza, como ninguna otra prensa europea, en ser el vocero mayor de la NATO en lo que al retorcido conflicto ucraniano se refiere.