
En este artículo el autor reflexiona, desde una perspectiva ecomunitarista, sobre la política de tod@s y la ceroporalidad -a diferencia de la multipolaridad y, por supuesto, la unipolaridad-, como garantías de otro mundo posible que haga realidad el principio rector ecomunitarista que reza: “De cada un@ según sus capacidades y a cada un@ según sus necesidades, respetando los equilibrios ecológicos y la interculturalidad”.