El avance de la tecnología en el siglo XXI es a gran escala, en especial en materia de las telecomunicaciones que beneficia y permite una comunicación más fluida y rápida entre las personas, junto con la aceleración de las nuevas tecnologías, está avanzando una enfermedad silenciosa, los especialistas lo denominan, hiperconectividad excesiva, asociada al comportamiento […]
El avance de la tecnología en el siglo XXI es a gran escala, en especial en materia de las telecomunicaciones que beneficia y permite una comunicación más fluida y rápida entre las personas, junto con la aceleración de las nuevas tecnologías, está avanzando una enfermedad silenciosa, los especialistas lo denominan, hiperconectividad excesiva, asociada al comportamiento psicológico anormal de los que padecen esta enfermedad.
La enfermedad de hiperconectividad excesiva, viene causando ciertos trastornos en los estudiantes que les lleva a situaciones inadecuadas de sus deseos y necesidades a través de los medios electrónicos, tabletas electrónicas, laptop, celulares, computadora, etc. realizando acciones compulsivas que empobrecen sus relaciones humanas, esto genera daños individuales y sociales.
La adicción o dependencia al uso de las tecnologías, tiene como causa, la evasión de la realidad concreta por el abandono de los padres, por el desinterés de las instituciones educativas, por falta de políticas educativas del estado en materia del uso de las tecnologías. No existe normas adecuadas de prevención de la nueva enfermedad causada por el uso de las tecnologías, los estudiantes lo utilizan como excusa para ser aceptados por un entorno abstracto.
Esta nueva enfermedad causada por el uso de las tecnologías, la hiperconectividad excesiva, viene perjudicando a los estudiantes en su formación integral, académica – social, por ende, intervienen en su bajo rendimiento académico, falta de hábito lector, deserción escolar, problemas psicológicos, etc. de la misma manera les saca del contexto real a un contexto imaginario virtual.
La adicción es el efecto de la nueva enfermedad por la obsesión en el uso del celular, computadora, redes sociales, juegos en internet, etc. están catalogadas como parte de la hiperconectividad excesiva, algunas causas asociadas son; la nomofobia, miedo a no tener a la mano el celular, la portatilitis, molestias y dolores musculares por usar y cargar portátiles en exceso, la ciberadicción, adicción al internet, facebook y whatsapp algunos usuarios consideran que no tienen amigos suficientes en estas redes sociales y llegan a sufrir una depresión. El síndrome de la llamada imaginaria, según investigaciones, lo padecen y han padecido casi el 80% de los usuarios de teléfonos móviles, este síndrome consiste en una alucinación que nos hace sentir u oír una llamada o vibración de nuestro celular, que no ha ocurrido.
Los padres son principales causantes de la nueva enfermedad, por el abandono al cual les han sometido físicamente y emocionalmente a sus hijos al no estar inmiscuidos en los asuntos académico y personales, por darles las libertades del uso de las tecnologías sin restricciones, es por eso que en el entorno social ya no se ve niños ni adolescentes en los parques o lugares de diversión presencial, más bien podemos encontrarlos en las diferentes cabinas de internet hasta altas horas de la noche, sin ningún control por parte de sus apoderados.
Las instituciones educativas no tienen un plan para contrarrestar el avance de la hiperconectividad excesiva, la nueva enfermedad del siglo XXI. Con prohibir el uso en algunos casos, no va solucionar el problema, eso generaría que los estudiantes lo hagan de forma clandestina con más riesgo a que dependan de las tecnologías, esa no es la solución, las instituciones educativas no tienen una planificación para el uso correcto y ético del internet, que les debe permitir un manejo de información que beneficie por el conocimiento que hay en el internet, la fluidez y rapidez de la información.
Cada estudiante debe ser consciente e informarse del avance de esta nueva enfermedad que les viene afectando silenciosamente, para poder contrarrestar el avance de la enfermedad los mismos estudiantes deben tener precaución para que no sean afectados con esta enfermedad del siglo XXI, para tal efecto se va requerir que sean conscientes de los efectos que pueda causar en ellos, deben desechar todo lo negativo que produce el uso de las tecnologías, olvidarse de estar horas excesivas en el manejo del celular, computadora, redes sociales, juegos en red, etc. solo utilizar para lo necesario de forma decente y ética para situaciones productivas, en especial para una formación acorde a las nuevas necesidades de nuestra sociedad que necesita de una nueva generación para lograr cambios significativos en nuestra patria.
Es necesario que intervengan los padres, siendo estricto en el control de manejo de las tecnologías, los padres deben inmiscuirse en la vida personal y académica de sus hijos, dar horarios para su uso, el acceso a las tecnologías debe permitir adquirir conocimiento e intercambiar información para que les beneficie en su labor académica. Dar un uso adecuado a las tecnologías y direccionar el uso para generar conocimiento e intercambiar información. Con esto poder prevenir la adicción y los efectos de esta nueva enfermedad que afecta físicamente y psicológicamente a los estudiantes.
Las instituciones educativas deben estar inmiscuidos en esta labor de concientización y apoyar en la prevención, orientando mediante charlas, cursos, seminarios, conferencias, etc. sobre el uso correcto de las tecnologías. Es necesario que las instituciones estén adecuados al uso y prevención de la ciencia y tecnología, pero también deben estar en el cuidado de los estudiantes para que esta enfermedad no avance silenciosamente, es necesario prevenir, estar junto a los padres, estudiantes inmiscuidos en la salud mental y física de ellos.
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