Cuatro muertos, más de cien heridos y decenas de detenidos es el saldo de los enfrentamientos el pasado 8 de julio, entre trabajadores bananeros y la policía antimotines en la provincia de Bocas del Toro en la región occidental de Panamá. Sirel conversó con Guillermo Puga, secretario general de la Confederación de Trabajadores de la […]
Cuatro muertos, más de cien heridos y decenas de detenidos es el saldo de los enfrentamientos el pasado 8 de julio, entre trabajadores bananeros y la policía antimotines en la provincia de Bocas del Toro en la región occidental de Panamá. Sirel conversó con Guillermo Puga, secretario general de la Confederación de Trabajadores de la República de Panamá (CTRP), quien comentó acerca de la grave y violenta situación que se vive en esa región y que teme se extienda a lo largo y ancho del país.
-¿Cuál es la situación en Bocas del Toro?
-La situación es grave, hay al menos cuatro muertos, un centenar de heridos y varios detenidos a raíz del conflicto que se originó el pasado viernes 2 de julio cuando más de 4 mil trabajadores del Sindicato de Trabajadores Industriales y Bananeros (SITRAIBANA), afiliados a nuestra Central, realizaron el cierre de calles, puentes y la paralización parcial del movimiento económico, principalmente en Changuinola en solicitud de la derogación de la Ley 30, homologada el pasado 16 de junio que limita las libertades sindicales además de flexibilizar las consideraciones ambientales para el funcionamiento de industrias.
Viola los Convenios 87 de Libertad Sindical y Protección del Derecho de Sindicación y el 98 denominado derecho de sindicación y negociación colectiva de la OIT y deja a libre criterio del gobierno las pruebas de impacto ambiental. Además deja en manos de la Policía la represión de la población con total impunidad.
El pasado 8 de julio el gobierno ordenó una tremenda represión contra los manifestantes y actualmente a la situación de caos y violencia se suma el toque de queda impuesto por el gobierno central de Ricardo Martinelli, que pone en juego los derechos constitucionales de los ciudadanos de la región.
-¿Se ha extendido el conflicto a otras zonas del país?
-Sí, sobre todo en la ciudad de Panamá se han realizado decenas de manifestaciones y se ha activado el movimiento sindical en las demás provincias del país.
-¿El gobierno ha dado alguna explicación ante los hechos represivos en Bocas del Toro?
-Hasta ahora no ha dado indicios de dar marcha atrás en lo que refiere a la ley, únicamente se ha dedicado a mandarnos la policía, enfrentándose a los trabajadores y al pueblo. Cabe señalar que este conflicto se dio en medio del anuncio del presidente Martinelli, de su viaje a Sudáfrica para presenciar la final de la Copa Mundial de Fútbol, hecho que habla del desdén con que el gobierno se toma los problemas que enfrenta su pueblo.
-¿Qué medidas tomó la CTRP?
-La semana pasada se interpuso una demanda ante la Corte Suprema de Justicia por la inconstitucionalidad de la ley y una denuncia ante la OIT.
También, hemos organizado diversas manifestaciones en Ciudad Panamá al tiempo que realizamos un llamamiento a la huelga nacional si el gobierno no deroga la ley 30.
-¿Cuál es el ánimo de los trabajadores?
-El ánimo es resistir. El movimiento sindical panameño está dispuesto a mantener una huelga general hasta que el gobierno de marcha atrás con esta ley que es inconstitucional y permite a los empresarios, entre otros aspectos, evadir el pago de horas extras y establece la eliminación de la obligatoriedad del pago de la cuota sindical por medio del descuento directo.
Fuente: http://www.rel-uita.org/