Eric Nepomuceno

Artículos

En otra clara muestra de su alejamiento de la trágica realidad vivida por Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro participó ayer sábado de una marcha que reunió a miles de motociclistas en São Paulo.

El ultraderechista Jair Bolsonaro tardó diez meses en aceptar la idea de comprar vacunas, y diez minutos para ofrecer Brasil como sede para la Copa América.

Desde la retomada de la democracia en Brasil, en 1985 y luego de 21 años de dictadura militar, el Ejército no vivía períodos de tensión interna como los que enfrenta bajo la presidencia del ultraderechista Jair Bolsonaro.

El pasado jueves, un nutrido grupo de académicos de primera línea y distintas especialidades y juristas especialmente respetados, enviaron una petición al Supremo Tribunal Federal, instancia máxima de la Justicia en Brasil, para que el ultraderechista presidente Jair Bolsonaro sea sometido a una batería de exámenes para evaluar su condición mental.

Este martes, a menos que ocurra alguna sorpresa, será instalada una CPI –Comisión Parlamentaria de Investigación- en el Senado. Será instalada no por decisión del presidente de la Cámara alta, sino por decisión explícita – y dura – del Supremo Tribunal Federal.

Siempre que un cobarde se siente acosado distribuye al aire amenazas que sabe que no podrá cumplir y manotazos que se pierden en el viento.

En 1996, el 17 de abril fue un miércoles. Y al atardecer de aquel día una marcha que reunía a más de dos mil personas –jóvenes, mujeres, hombres, niños y ancianos– fue blanco de fusiles y pistolas de la Policía Militar del estado de Pará, en la región amazónica.

Brasil sigue ahogado en la creciente ola de coronavirus, que diezmó oficialmente más de 335 mil vidas.

En diez años, la guerra civil en Siria, que causó impacto en todo el mundo, provocó 300 mil muertes.

En medio a la tragedia que produce el mayor número de muertes diarias por el coronavirus en todo el mundo –son casi dos muertos por minuto en los últimos 15 días–, Brasil vive una situación insólita, retrato perfecto del caos imperante: el gobierno genocida del ultraderechista Jair Bolsonaro cuenta con dos ministros de Salud.

1 6 7 8 9 10 28