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Proyectos en competición en la integración regional de América del Sur

Fuentes: Medelu

Traducido para Rebelión por Susana Merino

Juan Pedro Stédile afirma sin ambages: «La geopolítica suramericana se halla subdividida en tres bloques». Para el fundador y miembro de la coordinación nacional del Movimiento de los Trabajadores sin tierra (MST) del Brasil -el más poderoso de los movimientos sociales latinoamericanos- existe un primer «proyecto de recolonización del subcontinente por medio del cual los EEUU tratan de reapropiarse (de las) economías y (de los) recursos naturales (de la región)» Y precisa. «Ha sido durante el segundo mandato de Barack Omana cuando se han puesto de manifiesto las tentativas de reactivación de los acuerdos de libre comercio leales al espíritu de la difunta Zona de Libre Comercio de las Américas (ALCA). Estoy pensando, por ejemplo, en la Asociación Transpacífico (PTP) o en las tentativas de acercamiento al Mercosur. Se trata de un proyecto impulsado por los EEUU que se apoya en varios socios como México, Colombia y otros».

Según el dirigente del MST existe un segundo proyecto que trata de acelerar «la integración de América Latina en el mundializado moderno sistema capitalista. Se trata de una ambición impulsada por la burguesía y por una fracción capitalista opuesta al imperialismo estadounidense. Argentina y Brasil son sus principales promotores».

Y luego, prosigue, «está la Alianza Bolivariana de los pueblos de nuestra América (ALBA) fundada por Cuba y Venezuela. En este último caso se trata de un proyecto anti imperialista y antineoliberal, pero que no es socialista porque actualmente no están dadas las condiciones para instalar el socialismo» Y agrega «Los actores de estos tres proyectos ven que sus márgenes de maniobra evolucionan en función de las circunstancias políticas. Durante la presidencia de Lula en Brasil asistimos a la conformación de una alianza estratégica entre el segundo y el tercer proyecto» (1).

La evolución producida en 2013 parece darle la razón a Juan Pedro Stédile. En lo referente a la integración regional, el año estuvo marcado por tres grandes acontecimientos. En primer lugar la muerte de Hugo Chávez el 5 de marzo. La desaparición del presidente de Venezuela, luego de dos años de luchar contra el cáncer, ha dejado huérfana a la integración regional latinoamericana, junto al presidente Lula, de uno de sus principales inspiradores. Estos dos dirigentes populares han sido sin duda alguna, los artesanos de la afirmación de la independencia política latinoamericana a los largo de los años 2000 y especialmente frente a la potencia tutelar estadounidense (alianza estratégica mencionada por Stédile).

Algunas semanas más tarde, el 23 de mayo, la 7ª Cumbre de la Alianza del Pacífico en Cali (Colombia) consagraba el fortalecimiento económico y político de este bloc conformado por Colombia, Chile, México y Perú (2) Orientado hacia el libre comercio (3) y a las relaciones privilegiadas con los EEUU, esta alianza representa el 35% del PBI de la región y el 26% de las inversiones extranjeras directas. Vincula igualmente a cuatro países que disponen de un frente marítimo sobre el océano Pacífico. En el plano neoeconómico, busca disputar la hegemonía regional del Mercosur y la de su campeón brasileño. La próxima Cumbre se realizará nuevamente en Colombia, en Cartagena de Indias, el 11 de febrero de 2014.

Su desarrollo se inscribe en u marco más amplio: la asociación transpacífico. Impulsada directamente, desde el 2011, por la administración Obama, el PTP intenta relacionar a doce países de la región Asia/Pacífico, la mayor zona de libre comercio creada en el mundo con el objeto de fortalecer el peso económico de los EEUU y contrapesar la expansión de China en esta «megaregión» (4).

El PTP, cuyo peso en el PBI mundial es de un 40% y en el del comercio internacional de un 26%, cuenta en su seno a tres fundadores de la Alianza del Pacífico: Chile, Perú y México . También Colombia ha demostrado interés en el proyecto.

Este acuerdo secretamente negociado y bajo la influencia de los lobys estadounidenses, debería ver la luz en la primavera boreal de 2014, época en la que Barack Obama tiene previsto un nuevo viaje oficial al Asia.

Ha sido por otra parte, objeto de severas críticas por parte de los movimiento sociales internacionales. WikiLeaks advierte con razón sobre sus consecuencias. Ese sitio de información ha revelado recientemente como prevé organizar el PTP el fortalecimiento de los derechos de propiedad intelectual a favor de las multinacionales (Copyright, aumento de la duración y de las modalidades de aplicación de las patentes industriales, puesta en marcha de tribunales de arbitraje específicos para resolver los diferendos entre los Estados y las multinacionales, incorporando sus derechos por sobre las jurisdicciones nacionales) También estima WikiLeaks, como otros, que esta acuerdo aumentará los poderes de control de los EEUU sobre la Toile (¿pantalla de PC?) y la vida privada de las personas (5).

¿Podrá la reelección de Michele Bachelet (centro-izquierda) a la presidencia de Chile, el 15 de diciembre de 2013 modificar el curso de estas dinámicas? Si bien es demasiado pronto para saberlo, conviene sin embargo señalar que el programa electoral de la candidata Bachelet parecía incorporar una ligera inflexión en lo relativo a la Alianza del Pacífico. De modo que planteaba que Chile, debería inscribir esta iniciativa «en el marco de una perspectiva no exclusiva o antagónica con los demás proyectos de integración existentes en la región» (6)

Frente a estos planteos, los gobiernos progresistas, especialmente los del Cono Sur también se reorganizan.

La primera reacción se produjo en los países del ALBA (7). En la «Declaración del Pacífico» aprobada el 30 de julio de 2013 en oportunidad de la Cumbre de Guayaquil (Ecuador), la Alianza apelaba por primera vez a la creación de «una zona económica complementaria «entre el ALBA y los países del espacio Petrocaribe (8) y el Mercosur. Venezuela es ya miembro pleno de este último, especialmente luego de la ratificación, el 18 de diciembre de 2013, por parte de la Cámara de Diputados del Paraguay (9). También se le han unido Bolivia y Ecuador. La entrada de estos países del ALBA al Mercosur constituye el tercer acontecimiento importante del año 2013.

Se trata para ellos de invertir, a corto y mediano plazo, en la consolidación del bloque regional de los países con gobiernos progresistas y con buena relación con China frente a la Alianza del Pacífico y Washington.

Una primera etapa parece haber sido superada en ocasión de la Cumbre del ALBA/TCP Petrocaribe realizada en Caracas el 17 de diciembre pasado.

La declaración final de dicha Cumbre (10) confirma la voluntad de fortalecer lo sustancial de la Alianza. Se establece en efecto que «los miembros del ALBA-TCP se congratulan por los procesos alcanzados con la aprobación del texto del Tratado que establece la Alianza, luego de haber logrado un consenso que será firmado a la brevedad y que consolidará el marco institucional del LBA/TCP» De este modo el ALBA dispone formalmente de un texto jurídico fundante.

Dicha declaración anuncia al mismo tiempo la creación oficial de una «zona complementaria» entre el ALBA -TCP y Petrocaribe definida como «zona económica de desarrollo compartido, solidario, independiente, soberano destinado a consolidar y a extender el establecimiento de un nuevo modelo de relaciones económicas que permitan fortalecer y diversificar la estructura productiva y comercial».

En este espacio «mecanismos como el Sistema Único de Compensación Regional (SUCRE) [se trata de una unidad contable común a todos los países del ALBA] el Banco del ALBA y los grandes proyectos nacionales desempeñarán un papel significativo».

Se ha programado también un plan común de erradicación del hambre y la pobreza en el Caribe. Su puesta en marcha será asegurada a través de un vínculo con la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura).

La Declaración confirma la propuesta de establecer «una zona económica complementaria ALBA-TCP/ Petrocaribe y Mercosur» y establece que esta posibilidad será debatida durante la próxima cumbre del Mercosur que se realizará el 17 de 2014 próximo en Caracas.

Habrá que observar, sin embargo, cual será la decisión de Brasil. ¿Escogerá limitar el Mercosur a un espacio económico integrado a las dinámicas del libre comercio internacional como lo instan a hacer los EEUU y la Unión europea que está esperando actualmente una oferta del bloc para firmar un acuerdo de libre comercio? (11) ¿O por el contrario contribuirá a darle una nueva dimensión geoeconómica apoyándose en los nuevos miembros surgidos del ALBA? Y si así fuera, ¿cuál?

De la elección de Brasilia dependerá de manera determinante el porvenir y la dinámica de integración regional de América del Sur y especialmente de la Unasur.

Notas

1) Entrevista realizada para el sitio del World Public Forum (WPF), 19/12/2013, ( http://wpfdc.org/raffaele-marchetti/the-challenge-of-global-capitalism-and-the-political-recipes-to-get-out-of-the-crisis ).

2) La creación de la Alianza del Pacífico fue propuesta en 2011 por el ex presidente del Perú Alan García, antes de haber sido oficializada en 2012

3) Ese mismo año Colombia y Perú firmaron un acuerdo de libre comercio con la Unión europea que entró en vigor para Perú el 1° de marzo y el 31 de julio para Colombia.

4) Sobre este tema leer Christophe Ventura: » Le Partenariat transpacifique, nouvel outil de l’hégémonie de Washington » et » Washington se relance dans le nouveau jeu latino-américain». Son sus miembros Australia. Brunei, Canadá, Chile, EEUU, Japón. Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam. Corea del Sur estaría próxima a unírseles.

5) Consultar el sitio de Wikileaks: https://wikileaks.org/tpp/. Découvrir également la campagne d’information de l’ONG états-unienne Public Citizen, » Join the Global Fight-Back Against TPP » : http://www.citizen.org/tppaction

6) » Bachelet orientará la participación de Chile en la Alianza del Pacífico sin abandonar otros proyectos de integración «, Gestion, 25/12/2013.

7) Antigua y Barbuda, Bolivia, Ecuador, Dominica, Nicaragua, Sanvicente y Granadina, Venezuela.

8) Este acuerdo de cooperación energética creado en 2005 por iniciativa de Venezuela organiza una alianza entre este país y otros 17 del Caribe. Les asegura provisión de petróleo en condiciones privilegiadas y les garantiza su seguridad energética.

9) Luego de una crisis diplomática luego de la destitución de Fernando Lugo, esta decisión normaliza las relaciones entre Paraguay y Venezuela como también las de los países del Mercosur y del Unasur.

10) Disponible en inglés en: http://venezuelanalysis.com/news/10251

11) Leer Chiara Giordano: «Le Brésil, le Mercosur et les négociations avec l’Union européenne»

Fuente: http://www.medelu.org/Des-projets-concurrents-pour-l