Eduardo Nava Hernández | 

La presentación pública el jueves 18 de agosto del informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa encabezada por el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación Alejandro Encinas Rodríguez, y la detención el viernes 19 del exprocurador general de la República Jesús Murillo Karam marcan un avance importante en el esclarecimiento del caso de los asesinatos y desaparición de 43 estudiantes normalistas la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014 en Iguala.

Cristóbal León Campos | 

Cristóbal León Campos | 

No queremos que el tiempo pase y los años se acumulen como sucedió con la matanza de Tlatelolco o el Halconazo.

Conclusiones preliminares del Informe de la Presidencia de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa,

Entrevista a Clemente Rodríguez, padre de uno de los 43 normalistas desaparecidos

Andrés Figueroa Cornejo | 

Ya vamos a cumplir 8 años sin tener una respuesta. No la conseguimos del anterior gobierno, ni ahora del nuevo gobierno que nos está dando largas.

La llamada verdad histórica sobre los 23 estudiantes normalistas de Ayotzinapa es una falsedad construida por funcionarios de la policía estatal y federal, el ejército, la marina, la Procuraduría General, la Agencia de Investigación Criminal y la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido), a fin de dar por cerrado el caso e impedir que los estudiantes fueran realmente buscados y encontrados.

Cristóbal León Campos | 

En los últimos días el caso de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa ha vuelto a estar en los titulares de diversos medios.

Pedro Echeverría V. | 

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“A 3 años de mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador todavía no tenemos la verdad”, clamaron madres y padres de los 43 normalistas desaparecidos en el mitin realizado en el Hemiciclo a Juárez el pasado 26 de octubre. No se cansan ni se rinden a 7 años y un mes de los hechos trágicos en Iguala.

Marco I. Dávila C. | 

La indignación colectiva de los días, semanas, meses y años que le siguieron a la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014, fue de tal magnitud que los medios tradicionales no pudieron minimizar el caso.