– Lo sentimos, pero tú en este grupo no eres bienvenido.
– No me caes mal, pero nosotrxs no nos reunimos con gente como tú.
– Lo sentimos, pero tú en este grupo no eres bienvenido.
– No me caes mal, pero nosotrxs no nos reunimos con gente como tú.
En nuestra Sierra Central existen aún muchas llactas (aldeas) habitadas por quichuas que conservan la propiedad colectiva de la tierra, formas de organización social y códigos culturales propios del mundo andino.
En este artículo el autor sostiene que las razas apenas son un prejuicio político sobre el que se asienta el racismo, un discurso ideológico que legitima las desigualdades sociales.
Seis meses después de que Derek Chauvin fuera condenado por el asesinato de George Floyd, el caso de un hombre negro asesinado mientras salía a correr en Georgia, es una prueba de fuego mayor
Al comienzo, la gente de los Andes asoció el arcoíris con algo digno de temor, lo llamaron kuychi en quechua y se pensó que se introducía en los seres humanos para causar males y zozobras. Quizás, se empezó a llamar wiphala cuando recibió forma de imagen, se la figuraba con la forma de serpiente de colores blanco, amarillo, verde, rojo y negro que salía del inframundo acuático y llegaba al cielo.
Mientras se debate públicamente la prórroga de la ley que prohíbe los desalojos indígenas de sus territorios, los principales medios se esfuerzan por instalar el miedo al “terrorismo mapuche” y advierten del “peligro de perder la Patagonia”. El periodismo estigmatiza y el Estado adquiere legitimidad para reprimir. En silencio, los sectores empresarios se frotan las manos y esperan la resolución del “problema indígena” para apropiarse los territorios en disputa.
Lilian Thuram, futbolista campeón del mundo con Francia, activista y autor del libro El pensamiento blanco, explica cómo el color de piel se ha convertido en una categoría política, una identidad creada con carga histórica y forma de pensamiento
La pandemia de COVID-19 está remitiendo lentamente en Estados Unidos —al menos entre las personas vacunadas—, pero otra epidemia letal continúa fuera de control: la muerte de personas de color a manos de la policía.
Los blancos gritan: ‘¡Hemos descubierto la tierra de Brasil!’ Pero nuestros antepasados conocen esta tierra desde siempre. -Davi Kopenawa, chamán yanomami.
No hay nada que celebrar. La llegada de Colón a las Américas, lejos de haber sido una aventura heroica, fue un vertedero de sangre.