No es sólo una cuestión de números. Pero la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA señaló, en un comunicado del 20 de abril, que la policía y las fuerzas armadas de El Salvador habían detenido a al menos 9.600 personas (en el contexto del Régimen de Excepción, declarado el 27 de marzo), en muchos casos “de manera ilegal, arbitraria y mediante el uso de la violencia”. La CIDH se hacía eco, de este modo, de las denuncias de algunos medios informativos y las organizaciones de derechos humanos.