Ana María Hernández Salgar

Artículos

En la última semana de septiembre los jefes de Estado y de gobierno de 64 países anunciaron una de las promesas más firmes hasta ahora de revertir la pérdida de la diversidad biológica y las contribuciones de la naturaleza a las personas para 2030. Sin embargo, avanzar de promesas potentes a políticas y acciones concretas significa que la naturaleza debe moverse al centro de la toma de decisiones global, nacional y local. Es hora de reintegrar la naturaleza en todo lo que hacemos.