Artículos
El paradigma bélico se impone como prioridad “civilizatoria”
Debe reforzar el sistema de prevención de la tortura
El banco helvético Credit Suisse (Crédito Suizo) comparece a partir de este lunes 7 de febrero ante el Tribunal Penal Federal en Bellinzona (Cantón del Tesino). Debe responder sobre su oscura relación con un clan búlgaro implicado en el tráfico de cocaína y blanqueo de dinero.
Organismos de derechos humanos critican la política de inmigración
El Foro Social de las Resistencias reducido al formato virtual
Ninguna mejora en el empleo hasta 2023
La pandemia, la creciente crisis de los alimentos y el calentamiento climático global definieron la agenda de 2021. La quinta ola del Covid-19, agudizada desde inicios de diciembre por la explosiva variante Ómicron, mantiene en vela a la población mundial. Por otra parte, el drama creciente del hambre en el mundo denuncia el fracaso del actual sistema económico hegemónico. La falta de una respuesta contundente y viable a la crisis climática anticipa una ruta apocalíptica, sin retorno, para la vida y la Madre Tierra. 2022 se perfila, nuevamente, como un año desafiante para los movimientos sociales y la humanidad entera.
El Norte desarrollado no se cansa de repetir que la corrupción es el problema principal que frena el crecimiento del Sur. Sin embargo, son exponentes del gran capital financiero mundial con sede en Europa o Estados Unidos, los que, a menudo, deben sentarse en el banquillo de los acusados. Es entonces cuando esa construcción retórica cae como castillo de naipes ante la evidencia irrefutable: la corrupción y la impunidad son cimientos de un sistema hegemónico mundial y no de un continente determinado.
El 10% más rico del planeta posee el 76% de la riqueza mundial.
La mitad más pobre dispone apenas del 2% del total de la riqueza.
De la Cárcel de Coronda (Argentina) a Delémont (Suiza)