La participación militar de EE UU directa y sin intermediarios en Gaza, Líbano e Irán es de las pocas cosas que le quedan por hacer a Trump después del apoyo incondicional que el Gobierno de Biden brindó a Netanyahu.
La participación militar de EE UU directa y sin intermediarios en Gaza, Líbano e Irán es de las pocas cosas que le quedan por hacer a Trump después del apoyo incondicional que el Gobierno de Biden brindó a Netanyahu.
La victoria de Donald Trump sobre Kamala Harris en las presidenciales del 5 de noviembre significará probablemente una reorientación de las políticas de Washington en una serie de cuestiones, comentó a Sputnik Michael Maloof, exanalista del Pentágono. Oriente Medio, Asia y el futuro de la OTAN serían sus principales centros de atención.
Traducido por Silvia Arana para Rebelión
Según la Cancillería rusa, «a pesar de la poderosa campaña de propaganda lanzada contra Donald Trump por los demócratas, utilizando recursos administrativos con el apoyo de los medios de comunicación liberales, el candidato republicano, con la experiencia de su primera Presidencia a sus espaldas, se centró en las cuestiones de la economía y la migración ilegal, que realmente preocupan a los votantes, en contraposición al rumbo globalista de la Casa Blanca».
Traducido por Silvia Arana para Rebelión.
¿Qué nos queda como ecuatorianos? Por una parte, dejar de soñar en EE.UU. como el país de la libertad y de la democracia.
La farsa comienza un año antes de las presidenciales, cuando los votantes son convocados a elegir quién será el candidato de cada partido y en realidad lo que elijan es a los miembros de una convención que luego hará lo que mejor le convenga a la superestructura partidaria. Así pasó este año con los demócratas, que habían optado por la reelección de Joe Biden y cuando vieron que este patinaba psíquicamente lo cambiaron por Kamala Harris