La “guerra de Arauco” en el Wallmapu se reactiva nuevamente bajo otros medios…
Categoría: Territorios
En este artículo la autora analiza algunos de los elementos que entran en juego de cara a las próximas elecciones presidenciales.
Entrevistar a un líder sindical brasileño ante las elecciones que se avecinan, en la que todo indica, salvo cambios de última hora, que el nuevo presidente será un exsindicalista como Luiz Inacio Lula da Silva, es algo que marca mucho las preguntas. Lula, que pasó 19 meses preso y siempre alegó inocencia y persecución política, ya ha lanzado su campaña en la que pretende aglutinar a toda la izquierda. En frente tendrá a Jair Bolsonaro, líder de la ultraderecha y actual mandatario, que espera rete- ner el apoyo del mundo evan- gélico, y del mundo militar.
Nuestro interlocutor, Carlos Augusto Müller, es consciente de todo lo que se juega su país en los comicios del mes de octubre. No es ajeno a esa pregunta simple pero alarmante que domina el discurso político de Brasil: ¿Aceptará el presidente Jair Bolsonaro los resultados? Durante meses, Bolsonaro ha atacado el sistema de votación diciendo que está plagado de fraude, con unos funcionarios que están alineados contra él. Ha insinuado que disputaría cualquier derrota, y ha dicho a sus decenas de millones de seguidores que se preparen para luchar. «Si es necesario –dijo hace poco– iremos a la guerra».
La cuestión indígena está en el centro del interés del país y del mundo entero cuando la Comisión Internacional de Derechos Humanos en estos días evalúa la responsabilidad del Estado ecuatoriano frente al peligro de extinción de los pueblos amazónicos tagaeri y taromenani.
El precio de El Toque y la experiencia venezolana de Dólar Today.
Los crímenes de Íllora (Granada) y Peal de Becerro (Jaén) sacan a relucir las violencias de una sociedad en la que el racismo y el antigitanismo se encuentran muy presentes.
El legado perdurable del historiador del pueblo estadounidense en el centenario de su nacimiento.
La Unión Europea (UE) se viene abajo como proyecto político democrático y fuente de valores. Ni la derecha tradicional ni la socialdemocracia quieren verlo.