Recomiendo:
0

Spots de la FTC en Paraguay

Debilidad, confusión e ineficiencia

Fuentes: Rebelión

La Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) a pesar de los cambios de comandantes que ha sufrido parece que sigue siendo una Fuerza desatinada que se instala en la zona norte del país sin tener muy clara su misión. Aunque es bueno insistir que para varios sectores democráticos de la sociedad paraguaya, esa misión otorgada por […]

La Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) a pesar de los cambios de comandantes que ha sufrido parece que sigue siendo una Fuerza desatinada que se instala en la zona norte del país sin tener muy clara su misión. Aunque es bueno insistir que para varios sectores democráticos de la sociedad paraguaya, esa misión otorgada por el Ejecutivo a las fuerzas militares es inconstitucional y quizá sea esa una de las principales causas de los enormes y graves errores que la FTC viene acumulando en su haber. 

Desde agosto del 2013 los departamentos de San Pedro y Concepción tienen la presencia de contingentes militares actuando en cuestiones de seguridad interna y provocando más desaciertos que aciertos, violentando a comunidades y familias campesinas, como lo ocurrrido en setiembre del 2013 donde agentes encapuchados ingresaron a la fuerza a la vivienda de un docente a la media noche, en el Asentamiento Oñondivepa de San Pedro y lo torturaron por confundirlo con una persona con orden de captura, bajo la jefatura en aquel entonces de Mario Restituto González quien duró en el cargo hasta el 5 de agosto del 2014. La fuerza letal también ha sido una característica de la FTC, especialmente bajo la comandancia de Ramón Benítez, quien se caratecterizó por su alto grado de desproporcionalidad en el uso de la fuerza de fuego que ha generado gran crítica al Estado no sólo desde las organizaciones defensora de derechos humanos del Paraguay, sino de organismo internacionales como el Sub Comité de Prevención de la Tortura de la ONU; se puede recordar a modo de ejemplificar lo ocurrido en Kuruzú de Hierro en el 5 de seteimbre del 2014, ya bajo el segundo comandante de la FTC Ramón Benítez, donde perdieron la vida Marcos y Hermenegildo Ovelar y resultara gravemente herida Maria Gloria González.

A menos de 8 meses en el cargo, Benítez fue destituido y reemplazado por el Coronel Raul Erit Salinas. Desde la asunción del mismo, no se han sentido medidas muy destacadas por parte de las FTC, pareciera que se estaban dando un tiempo para reordenar lo interno, aunque lo más llamativo fue que los efectivos militares apostados en la zona norte denunciaron que no estaban cobrando su bonficación por «exposición al peligro».

Se esperaba que Erit Salinas pudiera revertir de alguna manera la imagen de debilidad, confusión e ineficiencia institucional en las que están sumidas las FTC, pero no tuvo peor decisión que la realización de un spot radial en el que entre otras cosas menciona:

«compatriota del EPP o del ACA: ¿Cuánto hace que usted no se re encuentra ni tiene la oportunidad de abrazar a su familia? Acabe con esa incertidumbre en el que viven… la Fuerza de Tarea Conjunta le ayudará a resolver sus problemas juridicos y económicos a causas de sus hechos…»

Las criticas, burlas y rechazo de la ciudadanía -con justa razón- no se hizo esperar por tan inesperado spot radial que difunde en varios medios de comunicación.

Con esta acción por parte de la FCT se demuestra una vez más falta de conducción clara, y eso es muy peligroso porque hablamos de una fuerza estatal con poder letal, que carece de estrategia y conducción clara, un peligro letal para la población civil y para la democracia. En cuanto al contenido del Spots, ¿en que pueden ayudar los militares en cuanto a la justicia y a lo económico? No es eso resposabilidad del Ministerio Público de establecer las penas correspondientes, en base a un juicio justo y transparente, las fuerzas militares están diciendo que se van a inmiscuir en las deciesiones de la justicia, ¿a qué se referirán con el apoyo económico?

La FTC bajo la dirección de Erit Salinas tuvo su primera pifiada, no es la única, ni será la última, pero urge que la ley de militarización sea derogada para devolver garantías a la poblaciones más empobrecidas de la zona norte y delimitar a los mandatos constitucionales la actuación de las Fuerzas Armadas, en lo que van de estos años es cada vez más visible que la militarización y la mano dura traen consigo sólo el aumento de la violencia, quiebre institucional y que pone en riesgo el régimen democrático. Y, por último, esperemos que a la FTC no se le ocurra realizar un spots radial de bienvenida al Papa Francisco a Paraguay, simplemente porque no es rol, ya están creadas las instituciones para el efecto.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.