Mientras las muertes por Covid-19 en Estados Unidos superan las 100.000, con un impacto desproporcionado sobre las comunidades de color, el asesinato y la violencia por parte de la policía contra personas de color, perpetrados con legitimación del Estado, continúan aparentemente sin tregua.

Mucho ha cambiado en estos cuatro meses. Cuando el coronavirus se expandía en silencio por Estados Unidos a inicios del año, el país estaba en un constante crecimiento económico y con un nivel mínimo de desempleo. Estas eran dos cartas clave en la campaña de reelección del presidente Donald Trump, que firmaba un ansiado acuerdo comercial con China. Una reelección que ahora no ve tan clara.

La policía de Estados Unidos, otra vez, asesinó a un ciudadano afroamericano. Durante toda la semana, miles de personas salieron a las calles a reclamar justicia.

Manuel Ruiz Rico | 

La Agencia de Inmigración y Aduanas, que gestiona estas instalaciones, ha informado de que el 49,4% de los 2.172 detenidos tiene coronavirus. En total, hay 27.908 migrantes privados de libertad en estos centros.

Las imágenes de George Floyd pidiendo que el agente de Minneapolis levante la rodilla de su cuello porque no podía respirar conmovieron al mundo. El hombre era amigo de la infancia del basquetbolista Stephen Jackson. LeBron James, el ídolo de los Lakers, comparó esa rodilla asesina con la protesta de Colin Kaepernik, sancionado por «faltar» el respeto al himno, en 2016. La policía reprimió manifestaciones pidiendo justicia, separaron a cuatro policías.

Glen Ford | 

Traducido del inglés para Rebelión por Beatriz Morales Bastos

Fander Falconí | 

Donald Trump es el cuadragésimo quinto presidente de Estados Unidos. Ha sido empresario, promotor inmobiliario, anfitrión de programas de televisión, dueño de un casino y especulador. A pesar de la alta dignidad que ostenta, es difícil considerarlo un líder, al menos no en la forma en la que ejercieron el liderazgo de la mayor potencia del mundo presidentes como Franklin D. Roosevelt.

El 1% más rico de la humanidad controla más de la mitad de la riqueza del planeta mientras el 80% más bajo tiene que conformarse con apenas el 4.5% de esa riqueza. Mientras se extiende el descontento popular contra esta desigualdad, la movilización ultraderechista y neofascista juega un papel crítico en el esfuerzo por parte de los grupos dominantes por canalizar dicho descontento hacia el apoyo a la agenda de la clase capitalista transnacional.

Mirko C. Trudeau | 

Hasta mediados de mayo, los 600 multimillonarios estadounidenses incrementaron sus fortunas por 434 mil millones de dólares durante la cuarentena parcial por la pandemia del Covid-19, mientras casi 40 millones de trabajadores perdieron su empleo y se teme que la tasa de desocupación supere el 16% de la masa laboral, Asimismo, el nivel de insuficiencia alimentaria se incrementó.

Como todos los doctores, quiero decirles a los pacientes que tengo un medicamento para darles. Pero quiero saber que su indicación está basada en la ciencia médica y no en la codicia de las empresas o la imprudencia del pánico.