
Es imposible adivinar el futuro y más en este caso ante el impredecible estilo de Trump. Sin embargo, sí podemos analizar algunas de las características de este escenario futuro basándonos en su enfoque político, económico y geopolítico.
Es imposible adivinar el futuro y más en este caso ante el impredecible estilo de Trump. Sin embargo, sí podemos analizar algunas de las características de este escenario futuro basándonos en su enfoque político, económico y geopolítico.
Las relaciones entre EEUU y China constituyen un eje central de las tensiones globales. En su epicentro está Taiwán. Las elecciones presidenciales del 5 de noviembre son seguidas por Beijing y Taipéi con expectativas y preferencias de diferente matiz.
Las Naciones Unidas nunca han expulsado a ningún estado miembro.
Sin embargo, en 1974 se intentó expulsar a la Sudáfrica del apartheid: un caso que presenta varias analogías con la actualidad.
Ahora la copa está llena.
La Francia de ultramar está formada por 12 territorios. Cada región tiene su historia, su cultura y su población. Aquello que comparten es “un pasado colonial y un presente que lleva las cicatrices de ese pasado.
Las corporaciones multinacionales ni están cumpliendo con las sanciones, ni están siendo sancionadas. Están aprovechan su Oportunidad, y siguen, y seguirán, con su ‘Business as Usual’ con los BRICS, usando mercados pívot. Nada hará que dejen de obtener beneficios, ni siquiera la guerra.
36 países, que representan más de la mitad de la población mundial, se reunieron en Rusia para preparar una nueva infraestructura financiera y económica mundial. El impacto a largo plazo podría ser enorme.