
Para la familia de Ramiro, la resolución de la Corte Suprema “resulta justa y necesaria, considerando que nuestro hermano se encuentra en un delicado y frágil estado de salud, internado en el Hospital Penitenciario de la penitenciaria de Santiago, sin un diagnóstico claro. Por lo que hoy resulta urgente que sea trasladado a un Hospital de Alta complejidad, donde puedan realizar todos los exámenes y tratamientos necesarios”