Fernando de la Cuadra | 

En este artículo el autor defiende que el presidente de Brasil carece de proyecto político para el país.

En las comunidades argentinas, las mujeres cuestionan: «¿cómo no vamos a luchar? ¿Nos secamos junto a la tierra?”

Corrupción e impunidad son dos constantes que recorren toda Latinoamérica. Partamos por decir que ambos fenómenos (en otros términos: la transgresión, la fascinación con el poder) son notas distintivas de lo humano. Se dan en todos lados, en los empobrecidos países del Sur así como en la prosperidad insultante del Norte.

Luego del resonante triunfo electoral del 18 de octubre pasado, el gobierno del MAS encabezado por Luis Arce y David Choquehuanca enfrentan, desde su asunción el 8 de noviembre, variados desafíos.

El Parlasur viene trabajando intensamente en pos de la defensa de la democracia en la región, acosada en los últimos tiempos por aquellos que no pueden implementar los planes neoliberales desde los gobiernos, ya que se encuentran con la resistencia de los pueblos.

En medio de la zozobra por la dramática situación sanitaria y socioeconómica, las y los ecuatorianos tendrán una nueva cita con las urnas el 7 de febrero.

A finales de marzo de 2020, el biólogo Robert G. Wallace, en conjunto con un equipo de especialistas, lanzaron una teoría donde esbozan el surgimiento y propagación de enfermedades que se presentan en el capitalismo actual, tales como el Covid-19.

Desafíos para la política revolucionaria: Apuntes para el debate

Luego de la sorpresa del llamado progresismo latinoamericano —a partir de la revolución bolivariana en Venezuela, la revolución ciudadana en Ecuador y la revolución política y cultural liderada por Evo Morales en Bolivia— el imperialismo impulsó una estrategia regional, y a la vez ajustada a las características de cada proceso para subvertir y destruir esas alternativas liberadoras, y continuar impulsando la recolonización de los recursos y subjetividades de nuestra América.

El Salvador está volviendo a sus peores tiempos. Esto se debe, en parte, a que lo gobiernan criminales del peor tipo: funcionarios en venta, sin seso y sin palabra, difusores de esa mal llamada “cultura de masas”, empresarios, sicarios y narcodependientes corruptos y ladrones, amigos de los poderosos, narcotraficantes y terroristas de Estado, violadores de derechos humanos, manipuladores, negadores del pasado. Para variar, respaldados por una masa informe de gente desesperada.